Sonarse los dedos puede provocar placer en algunas personas y molestias en otras. Pero, qué es lo que suena cuando nos crujimos los nudillos.

El sonido es el resultado del colapso de burbujas de gas dentro del fluido sinovial de las articulaciones. Cuando estas burbujas colapsan y se fusionan terminan estallando una vez que crecen en exceso, produciendo las ondas acústicas que conocemos como crujido.
La pregunta que nos hacemos es si es mito o verdad que la acción de crujir los dedos tiene impacto en la salud. Y la respuesta es que los estudios han demostrado que es muy poco probable que cause daños a futuro como artritis o debilidad en las manos.
A pesar de que sonarse los dedos es generalmente seguro, otros tipos de articulaciones requieren un cuidado más minucioso, particularmente aquellas en la columna vertebral y el cuello.
Estas zonas, por su complejidad y sensibilidad, sí pueden sufrir daños más graves si no se manipulan de forma adecuada, y provocar desde dolores de cabeza y mareos hasta consecuencias más serias como problemas arteriales y cardíacos.
Recomendaciones para mantener los huesos sanos
Para tener mantener las articulaciones sanas y prevenir enfermedades como la osteoporosis, es necesario:
Incorporar calcio y vitamina D: consumir suficiente es necesario para la salud de los huesos. La vitamina D por ejemplo, es importante para la absorción del calcio en el cuerpo, alimentos como el pescado y la exposición moderada al sol, son fundamentales.
Actividad física regular: incorporar ejercicios de carga o actividades como correr, caminar ayuda a fortalecer los huesos y su densidad.
Evitar sustancia como el alcohol o el tabaco, ya que debilitan los huesos.
Los controles médicos periódicos son fundamentales para evaluar la densidad de los huesos y tomar las medidas preventivas en caso de ser necesario.
En el Sanatorio Mater Dei cuidamos tu salud y la de tu familia.